1. Calcula bien el embalaje que vayas a utilizar: cajas de cartón, mantas, relleno para proteger objetos como papel de periódico o cartón ondulado. Después calcula nuestras tarifas de guardamuebles en Bilbao si te das cuenta de que todo no cabe en tu nueva vivienda.
2. Empaqueta siempre aparte los enseres de mayor valor: collares y otras joyas, documentos importantes, cuadros…
3. Intenta no sobrecargar las cajas. Si pesan mucho su desplazamiento será más complicado. No juntes muchos objetos pesados en la misma caja, lo mejor es equilibrar el peso.
4. Inscribe en cada caja el nombre de lo que hay dentro. Esto será muy funcional cuando las recoloques en la nueva casa.Las que contengan elementos frágiles deben estar especialmente etiquetadas como «Frágil».
5. Pon siempre lo que pese más al fondo de la caja, e incluye relleno. Lo más recomendable es que los objetos no se desplacen dentro de esta. Usa envoltorio de protección para las cosas más delicadas.
8. Cierra totalmente todas las cajas de tu mudanza con cinta de embalaje de calidad y resistente. Asegúrate de que se sepa cuál es la parte de arriba para que los profesionales de empresas de mudanzas como la nuestra, Azkar mudanzas de Bizkaia S.L. las coloquen siempre de la forma adecuada en el vehículo. Es buena idea pintar un flechita hacia arriba.
9. Haz una lista inventario y ponle un número a cada caja. Este es un ejemplo: 1. geles de ducha y cremas, 2. Juguetes, 3. Utensilios de cocina, etc.
10. Asegúrate de no embalar aquello que uses tu primera noche en la nueva vivienda. Serán sábanas, ropa y objetos de aseo, por lo que en una sola maleta te cabrán. Será la mejor opción.
Como ves, embalar para mudanzas y no acabar de los nervios no es imposible, si sigues este eficaz decálogo. La planificación y realización de todos estos puntos debe hacerse con la mayor tranquilidad posible. De esta forma, tu cambio de vivienda no será una pesadilla porque podrás desembalar todas tus cosas y muebles en tu nuevo piso con calma, ganas y mucha ilusión.